Cuando te digan que no puedes hacer algo, respóndeles: mira cómo lo hago
Todos hemos escuchado alguna vez esa frase tan típica de “eso no lo vas a conseguir” o “no tienes lo necesario para hacerlo”. La gente, por diversas razones, tiene la costumbre de poner límites a los demás, de decirles lo que pueden o no pueden lograr. Pero, ¿sabes qué? A veces esos “no puedes” son solo el empujón que necesitamos para dar lo mejor de nosotros mismos. La vida es como una carrera de obstáculos, y la clave está en no detenerse ante el primero que se presenta. Si alguien te dice que no puedes hacer algo, tú solo tienes que responder con un firme “mira cómo lo hago”.
Pero, ¿qué significa realmente esa frase en el contexto de la superación personal y el coaching? Vamos a verlo paso a paso.
El poder de los “no puedes”
Lo primero que tenemos que entender es que el “no puedes” no es más que una opinión. Y las opiniones no siempre son verdades absolutas. Este tipo de frases surgen de personas que, por lo general, no conocen tus capacidades o, incluso, pueden estar proyectando sus propios miedos e inseguridades en ti. En lugar de ver estas palabras como un obstáculo, puedes interpretarlas como una oportunidad de crecimiento.
En el coaching, siempre hablamos de cambiar nuestra perspectiva. Si alguien te dice que no puedes, ¿por qué no verlo como una invitación a demostrar lo contrario? La vida está llena de ejemplos de personas que, cuando les dijeron que no podrían lograr algo, se empeñaron aún más en hacerlo y, al final, lo consiguieron.
Piensa en Thomas Edison, quien inventó la bombilla. Miles de veces le dijeron que eso era imposible, que era una idea absurda. Pero él no se detuvo. “Mira cómo lo hago” fue la respuesta que le dio al mundo con cada prueba fallida, hasta que por fin consiguió lo que nadie creía posible. Y aquí estamos, disfrutando de la luz gracias a su perseverancia.
La mentalidad del “yo sí puedo”
La mentalidad de “yo sí puedo” es fundamental cuando enfrentamos los “no puedes” del mundo exterior. En coaching, nos centramos en ayudar a nuestros clientes a desarrollar una mentalidad positiva y proactiva. Este tipo de mentalidad no significa ignorar los obstáculos o las dificultades. Significa reconocerlos, pero no dejar que nos definan ni nos detengan.
Cuando alguien te dice que no puedes hacer algo, en lugar de tomarlo como una limitación, conviértelo en una motivación para seguir adelante. Aquí entra la magia de la resiliencia. Si alguna vez has superado una dificultad, sabes que lo importante no es el obstáculo, sino cómo decides enfrentarlo.
De hecho, la resiliencia es una de las claves para el éxito. Aprender a levantarte después de cada caída y seguir avanzando con la cabeza en alto es lo que diferencia a quienes se quedan atrapados en el “no puedo” de aquellos que, con determinación, responden “mira cómo lo hago”.
La acción como respuesta
Lo bonito de esa frase “mira cómo lo hago” es que no es solo una declaración, es una acción. Porque no basta con decir “sí puedo” o “lo voy a lograr”. Hay que demostrarlo con hechos. En el coaching, una de las lecciones más importantes es que las acciones hablan más fuerte que las palabras. Es cierto que la mentalidad positiva y la autoconfianza son esenciales, pero si no las respaldamos con acción, son solo pensamientos vacíos.
Cuando alguien te dice que no puedes hacer algo, no respondas con un discurso largo sobre tus capacidades. Responde con resultados. Hazlo. Muestra lo que eres capaz de lograr. Si estás trabajando en algo y tienes dudas sobre si lo conseguirás o no, toma acción. Da ese primer paso. El solo hecho de empezar ya te acerca un paso más a la meta. Y, cuando veas los resultados, ese “mira cómo lo hago” dejará de ser solo una frase, se convertirá en tu realidad.
Aprende de los fracasos
Ahora bien, aquí viene una parte importante que a veces olvidamos. No siempre lo que hacemos sale bien a la primera. No siempre obtendremos el resultado que esperamos desde el principio. Pero eso no significa que hayas fallado. Significa que has aprendido algo que te permitirá hacerlo mejor la próxima vez. En coaching, hablamos mucho de los fracasos como oportunidades de aprendizaje.
Cuando alguien te diga que no puedes, y te encuentres en medio de una dificultad o tropiezo, recuerda que el fracaso no es el final del camino, sino parte de la senda. Cada vez que fracasamos, nos acercamos más a lo que realmente queremos. Lo importante es aprender de esos errores, levantarte y seguir demostrando lo que eres capaz de lograr.
El impacto de tus acciones en los demás
Tu actitud ante el “no puedes” no solo tiene un impacto en ti, sino también en los demás. Las personas que te rodean están observando. Cuando demuestras que puedes, incluso cuando el mundo dice que no, te conviertes en un ejemplo para otros. Tu actitud puede inspirar a alguien que está pasando por lo mismo. Puede ser la chispa que encienda la motivación en otra persona.
Así que, cuando enfrentes un obstáculo, recuerda que no solo se trata de ti. Tu ejemplo puede cambiar la vida de alguien más. Tu respuesta “mira cómo lo hago” tiene el poder de inspirar y motivar. En el coaching, nos gusta decir que todos somos líderes, ya sea en nuestra vida personal, en el trabajo o en cualquier ámbito. Y ser líder significa, en muchas ocasiones, mostrar a los demás cómo hacer lo que parecía imposible.
“Mira cómo lo hago”
La próxima vez que alguien te diga que no puedes hacer algo, no lo tomes como un ataque ni una limitación. Tómatelo como un reto, una oportunidad para demostrar lo que eres capaz de hacer. Responde con la acción. Responde con confianza. Responde con resultados.
Cuando te digan que no puedes, simplemente recuerda: «mira cómo lo hago«. Porque no hay nada más poderoso que una persona que cree en sí misma, que está dispuesta a dar lo mejor de sí y que no tiene miedo de mostrarle al mundo lo que realmente es capaz de lograr.

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José Ignacio Méndez